Total, que hacia el Corte Inglés que nos fuimos con una misión. Cuando llegamos, le pedimos a la chica de la frutería un aguacate para hoy, pensando que sería muucho mejor dejar a un profesional escogerlo que buscar nosotras entre las bandejas de las neveras. Tampoco caímos en que para las 9 de la noche todos los aguacates "para hoy" ya tenían dueño y que quedaban solo las piedrecitas. La chica nos advirtió, pero nosotras con nuestra fijación por el guacamole nos llevamos la piedrecita, no sé si pensando que si lo metíamos en el micro ondas aquello maduraría.
En fin, como Murphy para mí es el más sabio de todos los sabios, ¿qué nos encontramos nada más salir de la zona de la frutería? - un estante con bandejas de aguacates!!! Por pura curiosdad me acerqué a ver si habíamos hecho buena compra, o si resulta que había un aguacate "para hoy" en algún lugar de Madrid y no nos habíamos enterado. Esto es como cuando no encuentras algo en Zara y vas de una tienda a otra preguntando por ese zapato en esa talla; yo me veía recorriendo fruterías y fruterías: ¿tenéis ese aguacate maduro?
Aquí es donde entra Murphy en juego: si ya has comprado un aguacate para dentro de una semana, lo siguiente que vas a ver es una bandeja de no dos, sino CUATRO aguacates PARA HOY!!!!!! Cualquier persona razonable en este punto admite la derrota y se va a casa con su aguacate duro y se espera lo que haga falta para satisfacer su antojo. Nosotras ¿qué hicimos? Comprar la bandeja con los CUATRO aguacates, por supuesto!!! Y como somos muy legales muy legales y algo vergonzosas (más bien tontas perdidas) no devolvimos el primer especimen. Resultado de la jugada: 5 aguacates para dos!!! Pero no hay ningún problema, según la tarjeta que les acompañaba, los aguacates son buenos PARA TODO: la piel, el pelo, el corazón... hasta decían que no engordan, cosa que no me acabo de creer. Conclusión: nosotras encantadas; poniéndonos en lo peor ibamos a tener hasta para mascarillas de cara.
Como hay que dar salida a mis queridos aguacates, y a día de hoy no he encontrado recetas de tartas de aguacate, que es como suelo dar salida a la fruta que está más negra que de su color en la nevera, ésto se ha convertido en Méjico lindo y querido: quesadillas de jamón serrano, queso brie y queso cheddar, quesadillas de jamón york y queso brie y cheddar, y sobre todo guacamole. Como no tengo limas hice una versión "aprovecha lo que tengas" del guacamole: con cebolla roja, zumo de limón, sal y algo de vinagre de módena. Estoy segura de que no es la receta correcta, pero estás cosas son más cuestión del gusto de cada uno que de seguir una receta al pie de la letra.
Ahora que lo pienso, en Top Chef un día vi un helado de aguacate, pero entre el frío que hace y que mi heladera tiene una raja por la que se escapa el líquido azul que se debe congelar al meterlo al congelador, va a ser que prefiero probar otras cosas.
Gracias HBO por empezar a darnos pequeñas muestras de lo que será para mí (junto con Mad Men, cuya cuarta temporada acabé de ver ayer y que me ha dejado pasmada) la serie del año que viene: la adaptación a la pequeña pantalla de las novelas de George R.R. Martin de la serie "A Song of Ice and Fire" que llevo leyendo y releyendo desde que estaba en el colegio.
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